dejando que me lleve el viento

no sé por qué tengo tantas ganas de llorar, como si me estuviera muriendo de pena. se me aprieta el corazón fuerte como aquella vez cuando terminé nuestra eterna relación amorosa, esa de años, la que creímos,ingenuamente, sería para siempre. que tontas.

bueno, la cosa es que tengo pena, y claramente no es por eso. a todo esto, que añeeeeeejo recordar esas cosas.

se supone que hace tiempo no me sentía tan feliz, se supone que ayer en el metro quería gritarles a todos que me sentía la tonta más feliz de la tierra, porque tú me haces feliz y quería que todos se enteraran. aún así tengo ganas de llorar. pero ganas de llorar no más, no pena, ni menos desolación.

alomejor- me gusta junto, suena más bacán qe a lo mejor - quiero llorar de alegría, porque tengo el alma tonta desde ese día en que miré tus ojos por primera vez, la primera vez qe me sumergí en esas aguas verdosas amarillentas, para no salir en un buen tiempo más (cruza los dedos, majo). entonces tengo alegría adentro y por eso lloro.

quizá también es miedo o alomejor es sólo porque denante me llegó la regla

en fin, estoy feliz, lloro y no sé por qué.